Todo parece indicar que estamos
iniciando una transición, lenta pero imparable, hacia un modelo de gestión de
empresas donde las personas serán el centro, sus comportamientos, su comunicación,
el aprendizaje continuo, la conciliación y la responsabilidad social, que
incluye cubrir las necesidades de las personas de forma sostenible. Partimos de
un modelo pura y estrictamente numérico, basado en el corto plazo de los
resultados, donde las personas son parte del “pasivo” de la empresa, aunque
muchos de sus directivos se hayan pasado décadas hablando de la importancia de
las personas en su organización, pero cuando han tenido que demostrarlo han
optado por el camino más rápido: Los despidos. ¿Sería el único camino?
Las empresas existen para generar
beneficios a sus accionistas, a sus creadores, a sus dueños, pero la clave está
en cómo se puede hacer, cómo recorrer ese camino de forma sostenible, sin que
ninguna de las partes sea la moneda de cambio en los momentos difíciles, sea
cual sea la parte afectada.
Google apuesta por una nueva red
social Ello, de momento aún en formato
beta privado solo accesible por invitación, con una estrategia aparentemente
suicida: Lanzar la idea de que los usuarios son personas, que no son números
que se puedan vender para analizar sus comportamientos y generar publicidad en
función de sus movimientos. “Ello” afirma no querer ser Facebook.
Te puede gustar más o menos, pero en su modelo de negocio tanto Google como Facebook tratan a sus clientes como
información para generar publicidad segmentada, ese es el “juego” generado en
el “Backstage” de ambas empresas. Con este guiño que Google hace apoyando la
red social “Ello”, está declarando de forma pública que es posible otro modelo
de negocio, basado en otros valores, con otros objetivos. ¿Será válido?
En el mundo de la empresa está pasando
algo parecido, aunque no tenemos una empresa que apueste por un modelo basado
en las personas de forma directa y abierta, todo lo que conocemos que marcha en
esta dirección, lo hace de forma controlada, sobre todo porque las
multinacionales que se lo podrían permitir mantienen estructuras heredadas
formadas por miles de empleados educados en la cultura empresarial del siglo
XX.
Ese es uno de los puntos clave de esta
transición, la cultura de muchas empresas y sobre todo de sus directivos,
educados en el formato tradicional de “activo” y “pasivo”, donde se clasifican
las cosas según la repercusión que tienen en la cuenta de resultados. Buscan
los beneficios a corto plazo. Aquí recomiendo la lectura del post de Mercedes
Hortelano @MyKLogica: “RRHH, ¿Pasivo o Activo?”, donde
nos habla de forma clara de cómo contabilizar a ese “activo más preciado”.
Muchos de los directivos actuales
deberían liderar este cambio, pero lo tienen complicado, con su formato de
modelo de negocio están cómodos y su puesto está respetado, están seguros bajo
esas reglas de juego. Salir de su zona de confort significa perder el control
de la situación y exponerse a la iniciativa de otros, incluso en algunos casos
atraer (contratar) talento es peligroso para ellos.
Pero eso también cambiará, los
actuales directivos y sus ideas de modelo de negocio tienen fecha de caducidad,
las nuevas generaciones, esas que ahora no son capaces de encajar en las viejas
estructuras empresariales tomaran por relevo natural las riendas de esas
empresas. Los Millennials o Generación Y deberán ser capaces de terminar este cambio que ya se
ha iniciado y que no tiene vuelta atrás. Un nuevo modelo de negocio que se basa
en la creación de beneficios de forma sostenible para todos los actores que
forman la empresa, una visión dominada por las personas que forman parte de esa
organización, donde son importantes sus ideas, su comunicación, sus
conversaciones, su aprendizaje colectivo (más que el individual), su talento.
Un cambio de cultura donde las empresas no estén encorsetadas por una sola
opinión, por un solo punto de vista, donde cada uno construya en el colectivo
lo que proyecta de sí mismo. Siempre sin olvidar que las empresas nacen y se
mantienen solo si generan beneficios.
2 comentarios:
100% con lo que expones Ximo y gracias por la referencia a mi entrada!
¡Saludos!
Gracias a ti Mercedes por el comentario. Un saludo @xsalas
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