Porque hablan de productividad cuando quieren decir sexo

Para entendernos, definimos productividad como la relación entre la producción obtenida por un sistema y los recursos usados para obtenerla. Definimos sexo como… esto creo que no será necesario, cada uno que se lo defina como quiera. Por cierto, este blog de momento no cambia de temática. En todo caso solo hablaremos de la productividad desde un punto de vista de los recursos humanos, para el resto, ya hay expertos.

Estamos cansados de oír que uno de los graves problemas que acechan a este país de “pandereta” es que no somos productivos, vamos que los países de nuestro entorno son mejores en esto (pero al futbol les ganamos). Si preguntas como se calcula esta productividad en la que somos malos, malísimos, la respuesta más popular que sueles escuchar es:

“Hombre/Mujer, la productividad se puede calcular de muchas formas…”

Vale, pues que la calculen de la forma que sea más ventajosa para este país y así no saldremos mal en la foto ¡No!

Blog Mis Vistas del Mundo

Fuera de demagogias que solo interesan a aquellos que no son competentes (véase  incompetentes), la productividad depende entre otros factores de los salarios, de las horas que se invierten, de la tecnología y maquinaria que se usen, y de la calidad del servicio/producto final. Pero sobre todo depende de las personas que forman el colectivo humano de una empresa.

Uno de los factores que se citan en una estrategia de mejora de la productividad en una empresa es la innovación en los Recursos Humanos y el desarrollo de políticas claras que apuesten por un equipo activo, formado, con talento, con ideas, participativo…

Pero aquí es donde tocamos madera (lo digo por lo que suelen tener algunos directivos dentro de la cabeza), por este orden: La primera piedra es que exista una política de RRHH definida. Si la superamos  ¿Cuántos empleados la conocen? Y si superamos esta con cierta nota, entonces ¿Se aplica? ¿Se apuesta por las personas?

Estimados lectores (que bien queda esto), en los últimos años en este país solo se ha invertido en mejorar la productividad vía despidos, es decir reduciendo el coste de personal, factor importante no lo dudo, pero crítico si no se hace bien. Lamentablemente dentro de esta actuación han perdido su empleo muchas personas válidas, porque no eran “del agrado” del que hacia la lista, y en este caso estabas jodido (De aquí el título del post). Aunque creo que ahora en el parlamento se dice de otra forma, como más culta. Bueno, anécdotas aparte, esto puede dar una idea de la prioridad que se tiene por la innovación en el mundo de las personas en la empresa.

Es más, ahora estamos presenciando un fenómeno migratorio por la falta de expectativas laborales, que hace que en 2011 más de medio millón de personas salieran de España (507.740), frente a las 457.650 personas que llegaron al país. ¿Se marchan los jóvenes que hemos formado en los últimos años? Es posible, el paro juvenil se situó en el 48,7% en el año 2011, este es un buen indicador ¡No! (Estos datos los puedes consultar en el Informe Infojobs ESADE 2011, Estado del mercado laboral en España) 

Y el estimado lector dice: Vale, vale ¡¡Alguna idea!!

Y el humilde bloguero responde: Pues sí, mira por donde para eso escribimos el post.

Ahora tienen las Pymes la oportunidad de usar nuevas tecnologías para innovar en el campo de las personas, con ellas y para ellas. Innovar en formación, en comunicación, en generación de ideas, en participación, en desarrollo de marca (interna y externa), en reclutamiento de talento, y más.

¿Crees que es posible la innovación en los Recursos Humanos?

¿Sería esta tu pareja en el baile de graduación? (Esta frase no tiene sentido, pero queda bien)

Y si confías en la fuerza que puede ofrecer el equipo humano de una empresa, ten cuidado y como en la película ¿Por qué lo llaman amor cuando quieren decir sexo? (Manuel Gomez Pereira, 1993), un@ puede desear una buena pareja para su show, pero no tiene que enamorarse de ella/él, algunas veces solo es sexo.

Moraleja ¡Cuida el talento de tu empresa! Y para esto también sirven las nuevas tecnologías. No las prohíbas ¡Úsalas!